La trilogía Neorrealista de Roberto Rossellini

El Neorealismo italiano dio muchas grandes películas, pero tan sólo una trilogía unida por la temática de la 2ª Guerra Mundial, y por un mismo director. Se trata de las obras creadas por Roberto Rossellini (1906 - 1977) en su primera etapa como realizador que se titularon: "Roma, città aperta" (1945), "Paisà" (1946) y "Germannia, anno zero" (1948).

Tras finalizar la Guerra muchos querían mirar adelante y ver lo positivo, pero una serie de directores entre los que se encontraba Rossellini, decidieron mostrar la realidad y contar lo que había sucedido realmente a causa del peor conflicto bélico de la historia. Ellos dejaron para la posteridad sus obras de arte realizadas con mucho esfuerzo y poco presupuesto, marcando una época y dando un estilo a sus productos que fueron elogiados en todo el mundo.

Sus tres películas pertenecientes al movimiento neorrealista muestran la crueldad de la Guerra y a los más perjudicados, que fueron las mujeres y los niños. En las dos primeras películas se centra en su país, Italia, donde él mismo vivió la Guerra (y creó largometrajes propagandísticos fascistas). En la tercera, tras los vítores desde el extranjero, decidió mostrar lo acontecido en Alemania en ese mismo periodo con un estilo muy depurado y más maduro que en las anteriores. Las características de estas películas y por qué pertenecen a la época dorada del Neorrealismo son las siguientes:

Como en la mayoría de películas del movimiento, mezcla actores profesionales con personas de la calle acordes a la estética realista que busca en sus personajes. Así mismo, narra hechos reales acontecidos en la guerra y en ocasiones protagonizados por los propios protagonistas, que no son lo importante como tal, sino las acciones en las que participan en el escenario bélico o postbélico.

Pese a que Rossellini es admirador del cine clásico americano y que comienza sus películas muy influido por ellas, evoluciona hacia una estética más personal y documental. Los finales de sus obras no acaban con finales felices, sino muy abiertos y dramáticos, suguiriendo hacia dónde pueden ir sus personajes destrozados por los sucesos acontecidos y con un futuro muy incierto y poco halagüeño.

De una forma muy inteligente consigue conectar con la audiencia poniendo un énfasis especial en los personajes que representan a niños y mujeres, los cuales han perdido a las figuras paternas o maritales y han tenido que luchar para sobrevivir dentro del caos de las ciudades, la pobreza y la maldad de sus conciudadanos. Rodar en espacios exteriores reales, sin los mejores materiales o condiciones son parte del estilo Neorrealista, al igual que la iluminación natural. Es curioso que estos productos fueron guionizados por el joven Federico Fellini en los dos primeros episodios, recibiendo nominaciones a los Oscar y ensalzando la figuera del futuro director como uno de los mejores guionistas del momento.

Imagen de la película "Roma, città aperta" (1945)

En 1945 decide mostrar lo que aconteció en su ciudad desde una perspectiva realista que cambia el paradigma internacional de la visión clásica del cine. "Roma, città aperta" es una ficción basada en cómo la Gestapo actuaba en Roma para detener a las personas que buscaba y un documento realista sobre el estado de la ciudad y el comportamiento de sus ciudadanos. Dentro de la trilogía es la obra más afín al movimiento neorrealista y junto a "Ladri di biciclette" de Vittorio de Sica, la mayor representante del mismo.

En 1946, el jovencísimo Roberto Rossellini conseguía realizar la segunda parte de su trilogía basada en la 2ª Guerra Mundial. Su título fue "Paisà" (Camarada), y continuaba narrando acontecimientos que en esta ocasión se desarrollaban a lo largo de Italia, narrando el avance de las tropas aliadas de Sur a Norte en 6 episodios. Pese a la fuerza que desprenden los seis episodios del segundo trabajo de esta serie Neorrealista, considero que los 3 más destacados son los que podéis apreciar en la fotografía inferior, en donde no sólo se muestra la dureza de la guerra sino cómo afectaba a las personas. 

En la primera fotografía (2º episodio) en que se ve a un niño junto a un soldado negro, podemos observar cómo era Nápoles tras la liberación y el gran número de huérfanos o familias que no tenían prácticamente nada. La escena final clarifica el sentimiento producido por un "liberador" al darse cuenta que la guerra puede haber terminado, pero no sus consecuencias, que perdurarán mucho tiempo. La foto de abajo, pertenece al último episodio de la película y deja ver lo difícil que era la batalla en los canales pantanosos, así como la astucia que había que tener para moverse por ellos. La unión entre italianos y aliados es permanente, y la imagen inicial con el cadáver en el río, demuestra la crueldad alemana. La tercera foto es un extracto del tercer episodio en donde vemos el paso del tiempo por la ciudad y lo que tienen que hacer sus habitantes para sobrevivir. Concretamente las mujeres, que se han convertido en prostitutas para poder vivir.

En su película de 1948, "Alemania, anno zero", decide finalizar su proyecto mostrando lo sucedido en Alemania durante la postguerra, en la ciudad de Berlín. Como protagonista utiliza a un niño que se verá obligado a madurar en una ciudad derruida y llena de maldad, que no deja indiferente a nadie.  Es su película mas madura y bella de las tres, consiguiendo involucrarse en una estética catastrófica que crea sentimientos de tristeza extremos.

Concordando con sus otras películas los niños, las familias y las mujeres se ven obligados a hacer de todo para no morir de hambre. De esta forma asemeja las consecuencias del conflicto armado en Italia con el de Alemania, demostrando que las personas se comportan de la misma forma ante situaciones semejantes. Las decisiones y pensamientos que pasan por la cabeza de los personajes están condicionados en todo momento por su supervivencia personal, sin importar lo que les suceda a aquellos que los rodean. La crueldad de lo mostrado generaba en la audiencia de la época un sentimiento de culpabilidad al comprender lo que estaba sucediendo aún acabada la Guerra.

Toda la trilogía es un producto narrativo pero que tiene características documentales y ápices muy altos de realidad sobre la vida durante aquellos años. Por eso se han convertido en películas necesarias para comprender el resultado de la 2ª Guerra Mundial y los comportamientos que tienen las personas en situaciones reales de precariedad.

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